Belén Gil
La repostería es un placer para el paladar, no lo vamos a negar, y de vez en cuando…apetece darse un capricho. Como siempre os comentamos, si es casera, mucho mejor: más barata, con materias primas de calidad y ¡un sabor a la carta!
Pero os recordamos, una vez más, que estos caprichos son OCASIONALES, por muy casera que sea la repostería, no debemos consumirla a diario, como parte de una dieta equilibrada. Os preguntaréis, ¿y ocasional, es….? Pues como muuuuuucho, muuuucho, una vez a la semana y un par o tres de estos croissants pequeñitos…no más. (Sentimos ser tan aguafiestas, pero es lo que hay).
Lo suyo es hacer el hojaldre en casa, si sois cocinillas de pro, os resultará fácil, pero entendemos que no todos tenemos tiempo o no nos apetece pasar mucho rato en la cocina. Por una vez, y sin que sirva de precedente, vamos a hacerlos con una masa comprada, CON UNA CONDICIÓN: ¡que no lleve grasa de palma! Intentad comprar una elaborada con mantequilla.
Ingredientes (para 16 croissants)
- 1 masa de hojaldre rectangular HECHA CON MANTEQUILLA
- 4 onzas de chocolate negro 85% cacao
- 1 huevo
Preparación
Pre calentamos el horno a 200º, calor arriba y abajo.
Cortamos el rectángulo de masa, tal y cómo veis en la foto: lo dividimos en cuatro partes, después de cada parte cuadrada, sacamos dos mitades, y a los rectángulos que han quedado, los dividimos en diagonal, para obtener 2 triángulos de cada uno.

Partimos las onzas de chocolate en cuatro trozos cada una, y las colocamos en la base del triángulo, como vemos a continuación, y enrollamos sobre sí mismos, empezando por la parte más ancha:

Cuando tenemos los 16 croissants, los colocamos en la bandeja del horno, y los pintamos con un huevo batido, con la ayuda de un pincel:

Los metemos en el horno, bajamos la temperatura a 180º, y los horneamos unos 20-25 minutos, hasta que estén dorados.Listo…dejamos enfriar un poco, y emplatamos.